Debido a las últimas decisiones de la Superintendencia de Instruía y Comercio (SIC), varios influenciadores de Villavicencio han mostrado su desacuerdo por no poder seguir haciendo contenidos publicitarios sin especificar que reciben pagos por medio de plataformas digitales como Instagram y Youtube. La superintendencia decidió poner un alto y publicar una guía de buenas prácticas para influenciadores y hacer de las herramientas digitales un uso correcto.
Angie Palomares, más conocida como Paloma D.S, bailarina profesional e influencer de Villavicencio, asegura que al tener una alta cifra de seguidores, las empresas le enviaban regalos y ella por su cuenta recomendaba al público el buen servicio que obtenía de estos productos, resaltando que al inicio lo hizo de manera natural y sin ningún ingreso económico.
Según la influencer llanera, los empresarios luego de ver los resultados que ella generaba al recomendar su marcas o productos, optaron por generarle ingresos a partir de la publicidad y mejorar sus ventas.
Esta polémica desató inconformidades en los consumidores de la región, dado que los compradores de estos productos, seguían las recomendaciones de ellos sin saber si eran recomendados por experiencia de su uso o publicidad.
No obstante, los consumidores no dejaron pasar por alto la situación. “Es injusto que los productos por los cuales pago por mi bienestar y salud, ni siquiera sean utilizados por ellos mismos y los están promocionando sin ninguna medida que garantice los beneficios del producto”, apuntó Laura Veloza, consumidora en la era digital.
“Cuando un influenciador está haciendo publicidad y calla sobre esa relación comercial, podría terminar respondiendo por publicidad engañosa” advirtió la Superintendente Delegada para la protección del consumidor, María Carolina Corcione.
El abogado llanero, Especialista en Derecho Constitucional y en Pensiones y Riesgos Laborales, Johan Alfredo Trujillo, afirma que no hay necesidad de ir se a medidas extremas en contra de las figuras públicas, ya que en la mayoría de los casos es la función de ellos, su contenido se encarga de llegar a más a personas y de paso apoyar y dar a conocer distintos servicios que se destacan en la región llanera.
Sin embargo, esta polémica no cesa, los consumidores exigen que los productos sean utilizados por ellos, debido a que están recomendando su compra y puede llevarse a causas legales en caso de que los servicios traigan efectos que los perjudiquen.
En vista de la discusión generada en redes sociales, es necesario que los influenciadores tengan precaución y se den regulaciones a la hora de publicar contenido publicitario y cuando lo realicen lleven en la publicación un hashtag que identifique que está haciendo publicidad para el público (#Publicidad).
Por: Tatiana Valentina Torres
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